donde los pensamientos se convierten en palabras, y se vuelve más fácil pasarlos a unos y ceros, mientras el cortocircuito entre neuronas se intensifica...

miércoles, 23 de enero de 2008

Vida y/o Muerte

Hace un tiempo me vienen a la cabeza diferentes pensamientos sobre la vida y la muerte (maldito dilema sin respustas conocidas hasta el momento....). Aproximadamente un mes atras falleció un hombre al que vi solamente una vez en mi vida, unos 20 minutos, con el que intercambiamos cerca de 4 ó 5 conversaciones diferentes... Se podría decir que fue nada.... Sin embargo fui a su velorio y fui tambien al entierro. Tanta gente llorando, tantos abrazos, tantos "lo siento".... en ese momento me replantee muchas cosas, como el típico "hay que aprovechar cada momento al máximo". Lógicamente esa reflexión no dura más que uno o dos días, hasta volver a la rutina.
Lo extraño y lo que me lleva a escribir esto, fue ver y descubrir cosas que antes, en situaciones similares no había detectado. Llega a ser hasta impresionante el hecho de que una tragedia como es la muerte de alguien pueda de repente hacer florecer tanto amor, tanta vida, podría decirse... Los familiares más cercanos al difunto estaban tan unidos que en ese momento podía pasar cualquier cosa, que nada los separaría. Ver ese cariño a flor de piel en cada abrazo de tristeza; las lágrimas desesperadas, totalmente libres y rebeldes, escapando entre tanta emoción; el calor desprendido en cada palmada en la espalda; la generosidad de todos en ofrecerse sin condición a toda petición de la familia afectada... Es impresionante como la muerte, algo tan triste, tan confuso, tan inexplicable, puede sin esfuerzo hacer brotar lo que más le da vida a uno: los sentimientos; el amor por el prójimo; esa satisfacción de ofrecer y dar, sin necesidad de pedir nada a cambio. Tanta tristeza entre tanto amor. Todavía me falta mucho por escribir y sin embargo no consigo encontrar esas palabras para poder explicar todo lo que percibí aquel día.
No pasé mucho tiempo con ese hombre y quizás no necesitaba pasarlo tampoco, pero en un momento me sorprendieron algunas lágrimas saladas escurriendo en mi cara.
Saber que en un tiempo volvería a ser tierra; saber que consigo se llevaba tanto, y ver, casi sin querer, todo lo que aquí dejaba. Es una mezcla terrible de emociones y sensaciones imposible de detener, que sin saberlo ayudan a descansar el alma...
Pense que ir me haría mal, pense que sentiría miedo, tristeza, pena... pero no fue así.
Después de cerca de un mes, quedan latentes en mi mente muchas cosas con respecto a este difícil planteo de Vida y/o Muerte.
Supongo que son cosas que no voy a saber hasta pasar al otro lado!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Van reflexiones:
Me motivó pensamientos (muy mios) el tema de la muerte. Cuánto nos cuesta aceptar una verdad incuestionable! Es más, vos la denominaste tragedia. Por qué no podemos ver lo natural de la muerte?
Mirá que ya pasaron siglos de generaciones tras generaciones, muchos grandes pensadores, mucha ciencia, pero igual nos cuesta reconocer que la única cosa que tenemos segura en la vida, que vamos a morir, sea verdad. Muchas veces pensé eso que vos bien decis: “Lógicamente esa reflexión no dura más que uno o dos días, hasta volver a la rutina.” Nos imponemos una rutina como única forma de soportar el paso del tiempo. Y así nos dedicamos a perderlo frente a una pantalla con un idiota como Tinelli (o el de turno) entreteniéndonos. Que palabra peligrosa: entretenerse...
Se puede traducir en perder tiempo en pro de no trascender. Y no me refiero a hacer algo que quede para la humanidad. Vos sabés muy bien que uno puede dejar que el tiempo pase, o festejar lo maravilloso de la vida tan sólo mirando a un hijo.

Pensamientos sueltos disparados por tu blog.

Besos desde la húmeda Bs. As.

Jorge

.:: JULY ::. dijo...

elijo festejar!

besos desde mi Mendoza querida!